El Centro de Rehabilitación de Daño Cerebral CRECER, con más de 17 años de existencia, ha desarrollado un protocolo cerebro-saludable para sus pacientes afectados por ictus, accidentes y enfermedades neurodegenerativas que se basa en dieta y estrategias que favorecen la recuperación. La directora médica, la doctora Rosario Domínguez, hace un llamamiento para que estas pautas sean extensibles a la población y se adopten como estrategias del día a día, "ya que al alargarse la esperanza de vida están creciendo vertiginosamente las enfermedades neurodegenerativas, hasta el punto de que pueden llegar a ser el gran problema de salud de los próximos años".
Según la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades cerebro vasculares (ECV) son la principal causa de muerte en todo el mundo, hasta el punto de que en 2011 sólo por enfermedades cardiovasculares fallecieron en el mundo más de 17 millones de personas. La crisis económica y el incremento de factores de riesgo, como el consumo de tabaco, dietas malsanas y la obesidad, la inactividad física, la hipertensión arterial, la diabetes o el aumento de los lípidos, ha perjudicado aún más estas cifras y este panorama.
Ante esta situación, Rosario Domínguez ha alertado de la importancia de crear una conciencia social para prevenir enfermedades cerebrales, algo para lo que es fundamental la alimentación y evitar la contaminación. En esta línea, la directora de CRECER hizo hincapié en la importancia de evitar contaminantes directos como fungicidas, pesticidas y elementos agresivos con la cadena alimenticia y el aire que respiramos. "También tenemos que alejarnos de los desengrasantes, que se usan mucho en la limpieza. Todos estos elementos son liposolubles y atacan a las membranas celulares de nuestro organismo, pudiendo estar en el origen y la expresión genética de enfermedades neurológicas y del deterioro de procesos cognitivos".
CUIDAR MÁS EL CEREBRO
Ante la proliferación de enfermedades neurológicas es importante recurrir a tratamientos con fármacos y nutrición, pero hay que ayudar a la recuperación a través de técnicas que eviten el estrés y la polución. Y qué decir de dos grandes enemigos como son el alcohol y las drogas, que causan un grave perjuicio
El cerebro necesita que todo el organismo esté sano para trabajar en las mejores condiciones posibles, algo para lo que hay que esforzarse en adoptar una dieta cerebro-saludable. Una de las claves, para ello, es tener una alimentación sana.
Precisamente no hacerlo genera muchas enfermedades. El cerebro requiereque todo el organismo esté sano para trabajar en las mejores condiciones. Si queremos conseguirlo deberemos evitar productos con pesticidas y fungicidas, el sedentarismo y todos aquellos factores que nos hagan enfermar y pasar a padecer enfermedades cardiovasculares, obesidad o diabetes.
"El cerebro es una esponjita muy sensible que se ve afectado fácilmente por ataques y dolencias procedentes del resto del organismo, así como por sustancias agresivas como el alcohol y las drogas", explica la directora médica de CRECER. De ahí que haya que mantener el cuerpo lo más sano posible y evitar las grasas animales, a la vez que se ha de tomar muchas verduras, fruta, pescado, y carnes magras. Los frutos secos son unos grandes aliados del cerebro, y no podemos olvidarnosdel agua, que ha de estar en las mejores condiciones de salubridad.
La doctora recuerda que "estamos en la era del cerebro. Tenemos que cuidarlo y mantenerlo sano para prevenir enfermedades degenerativas y accidentes cerebrovasculares. Es un reto muy importante, ahora más que nunca".